Lo mas decepcionante hasta ahora.
El edificio del arquitecto estadounidense ha resultado ser lo peor que hemos visto hasta la fecha. La construccion, al menos por fuera, no era nada del otro jueves y como consecuencia la visita ha durado apenas 5 minutos.
Por suerte el templo ha resultado algo mas interesante. Muy bonito el pasillo de toris rojos al estilo Memorias de una geisha. Pero teniendo en cuenta que el lugar estaba consagrado a la fertilidad (chiste interno) no he podido evitar acordarme de cuando mi amigo Pasquale Ikari le pregunto a una chica por la ventanilla del coche si estaba en edad fertil XD.
El centro de reproduccion espiritual.
Para terminar el dia nos hemos ido a Akabane con Furukawa para echar una partidita de bolos. Las bolas de aqui estan muy chulas (tienen una serie de peculiaridades que ya les comentare a mis colegas "boleros" cuando regrese) y la bolera tenia cerca de 30 pistas. Mas del doble que donde jugamos habitualmente.
La bola con purpurina en su interior.
Bueno, pues esto ha sido todo por hoy. No olvideis que hay que vitaminarse y mineralizarse. Nos vemos ma*ana mis querid@s sith.
Etiquetas: Crónicas Tokiotas